Hasta ahora hemos visto varias ventajas que el marketing automático puede aportarte a ti y a tu empresa. Seguramente ya habrás ido encontrando en este mismo blog respuestas a las dudas que te acechaban, pero antes de continuar avanzando, quizás no esté de más echar la vista hacia atrás y repasar algunos de los falsos mitos que hemos ido desmintiendo a lo largo de estas entregas.
Lo primero que hace falta que tengamos presente es que las campañas de marketing online no consiste solamente en apretar un botón una vez y esperar resultados. ¡Para nada! Como en la mayoría de negocios solamente la perseverancia y ser constante en aquello que estés haciendo podrá ayudarte a incrementar tu volumen de ventas. Además, para llevar a cabo cualquier acción antes hay que haber estudiado y planificado al detalle cada uno de los pasos que vamos a desarrollar y, en caso de que sea necesario, pulir y corregir aquello que no funcione una vez ya esté en marcha toda la maquinaria.
Esto que hemos visto también desmiente la creencia que automatizar campañas es la salida más fácil para muchas empresas. Aunque los métodos de trabajo hayan evolucionado y la tecnología esté cada vez más al alcance de todos, estructurar este tipo de contenidos con éxito puede requerir de un impulso por parte de profesionales que dominen a fondo esta temática y que sepan prever los pasos de los clientes potenciales.
Y es que nuestra área de trabajo va mucho más allá de los simples correos electrónicos que a más de uno le pueden recordar al tan temido spam. Una buena campaña de márketing automático lleva consigo un volumen de trabajo mucho más elaborado y meditado que brilla con luz propia cuando asoman los primeros resultados. ¡Y ojo! Hablamos de los resultados numéricos, para despejar cualquier duda.