¿Qué tienen en común 100 abogados, Google, los Bitcoins y el Marketing Automation? Léelo aquí

El pasado jueves estuve dando una charla titulada: “Herramientas digitales para conseguir y gestionar clientes” en la jornada del empleo del Colegio de Abogados de Barcelona donde fui gentilmente invitado a participar.

 

La audiencia llenaba la sala y, como no podía ser de otra manera, estaba formada principalmente por jóvenes engominados vestidos de impecable traje y corbata (atuendos que pienso ya son de apaño exclusivo de abogados y banqueros).

 

El argumento daba para mucho, pero tenía poco menos de una hora, así que entré de lleno en los conceptos básicos de presencia web, posicionamiento, publicidad online y aquí, obviamente, nos detuvimos a hablar de Google AdWords.

 

En todas mis charlas trato de dar ejemplos con los que la audiencia pueda sentirse identificada, los cuales improviso en cada caso sobre la marcha. Llegado el momento de explicar las ventajas y desventajas de trabajar con un monopolio “de facto” como es Google en el sector de los motores de búsqueda, comenté, como de costumbre, que la ventaja es que, con un solo medio, AdWords, alcanzamos el 97% del mercado de búsquedas y que la desventaja es que tenemos que atenernos a las rígidas políticas editoriales del gigante de Mountain View. 

 

Como probablemente sepas, Google prohíbe la publicidad de todo producto ligado a las drogas, alcohol, armas, fomento de la violencia, racismo (y un largo etcétera) y restringe otros como las medicinas. 

 

Esta política loable en principio, si bien un poco puritana en mi opinión aunque en línea con la rígida ética anglosajona, puede llegar a límites insospechados como en el caso de aquel cliente que vende cestas de Navidad y que todos los años tiene que retocar las fotos de las cestas y lotes para camuflar las botellas de champán y vino por otras de aceite y vinagre a fin de pasar el estricto filtro de AdWords.

 

Sin embargo en esta ocasión y ante la atenta mirada de ese nutrido grupo de futuros jurisconsultos no me pareció esta la anécdota más adecuada y me vino a la mente la última prohibición que ha puesto en vigor Google referida a las criptomonedas y a los productos financieros de alto riesgo como las inversiones en Forex, opciones binarias, etc.

 

Es más, enfervorizado por el argumento, me explayé sobre mi experiencia personal durante mi etapa como director de marketing online de una agencia de valores que comercializaba justamente Forex, CDF’s, y otras “armas de destrucción masiva” de pequeños patrimonios de ahorradores atraídos por una desmedida ambición de ganancias fáciles.

 

Aunque Google no ha entrado en justificar los motivos de la prohibición, las estafas con criptomonedas y operaciones financieras de riesgo comienzan a llegar a los tribunales y a algún abogado se le puede ocurrir incluir la responsabilidad del soporte como aval de la oferta. Incluso las entidades que trabajan con bitcoin han alertado sobre las supuestas estafas con el tema convenientemente promocionadas. 

 

De golpe me percaté que el interés por el argumento de la charla se había multiplicado: muchos Perry Mason se habían enderezado en sus sillas y varios estaban tomando apuntes frenéticamente, lo que me hizo venir a la mente que nada como una buena estafa multitudinaria para motivar a un grupo de ambiciosos futuros abogados.

 

Así que no sé si al final las bondades de las nuevas tecnologías aplicadas al ejercicio de la abogacía han calado en la audiencia, pero creo que he abierto a esos jóvenes profesionales todo un mundo de nuevos y lucrativos nichos de mercado todavía por explorar amén de plantar la semilla de una hipotética y costosísima causa a los daños del mismísimo Google.

 

Por otro lado me quedé pensando en los pobres anunciantes de Forex y Criptomonedas, preguntándome si, ahora que Google les ha vetado, han pensado en utilizar estrategias de automation marketing…

 

Es solo una idea 😉 

 

SOLICITA UNA DEMOSTRACIÓN EN LÍNEA

 

(probar no cuesta nada y sirve aunque no vendas Bitcoins)

 

Buen fin de semana.